Confesión: Nunca me he sentido lo suficientemente bien. Soy lo que se llamaría una superadora. Un perfeccionista. Nunca me he sentido digno a menos que haya logrado algo. De niña, me esforzaba por recibir elogios de mis padres y profesores, por dominar las tareas escolares y por no meterme nunca en problemas. Pero seguía sin sentir que era suficiente. En el instituto, deseaba tanto ser admirada por mis compañeros que pensé que presentarme a la presidencia de la clase me haría ganar algo de adoración. Pero seguía sin ser suficiente. Como adulta de veintitantos años, con grandes amigos, una familia que me adora, un máster y una vida maravillosa viviendo en el extranjero con la pareja de mis sueños… sigo luchando con el amor propio y la aceptación. Cada. Cada. Día.
¿Y sabes qué? Sólo he tardado 30 años en darme cuenta de que, a pesar de todo lo que consiga, eso nunca equivaldrá a quererme a mí misma. Tampoco lo hará el dinero, la popularidad… ya entiendes la idea. Puede parecer que estoy diciendo algo obvio, pero déjame hacerte una pregunta: ¿Por qué perseguimos sin descanso los logros, la fama, el dinero, etc. si sabemos que esas cosas no nos llenarán de amor y compasión por nosotros mismos? Seamos claros: no estoy hablando de una autoinflación masiva-ego-Kanye-loves-Kanye. Lo que quiero decir es una aceptación completa y total de uno mismo (¡con defectos y todo!) y la capacidad de vivir plenamente ejerciendo la gracia y el perdón hacia uno mismo sin juzgarlo.
Suena bien, ¿verdad? Hasta hace poco, solía pensar que este tipo de actitud elusiva de confianza y no de burla nacía, no se hacía. Pero en realidad, a través de la experiencia me he dado cuenta de que el amor propio es una habilidad que puede cultivarse con la práctica. Así que vamos a la razón por la que estás aquí, querido lector. Si quieres conocer las 5 formas en las que he podido cultivar más amor por mí misma a través de la práctica espiritual, entonces sigue leyendo.
1. Meditar sobre el amor y la compasión
VOSOTROS. La meditación cambió mi vida, en serio. Hay como mil millones de recursos para la meditación, así que no voy a entrar en todo eso aquí. Yo recomendaría usar meditaciones guiadas en YouTube, o una aplicación como Headspace si eres nuevo en la práctica. Calm y Insight Timer también son excelentes. Si puedes convertirlo en una práctica diaria, mucho mejor. Empezarás a notar la diferencia incluso después de 10 minutos. La constancia es la clave. Hay tipos de meditación específicos para cultivar el amor propio y la compasión. Una de ellas, la meditación de la bondad amorosa, deriva de una antigua práctica budista que consiste en desear buena voluntad hacia uno mismo y hacia los demás, y se ha demostrado científicamente que aumenta los sentimientos de autocompasión. Kristen Neff, psicóloga de la Universidad de Texas, tiene un montón de recursos estupendos en su página web y unas cuantas meditaciones guiadas que puedes probar.
2. Escribe un diario para conocer tu subconsciente
Siempre he sido una gran fan de escribir un diario. Si me siento dispersa o desarraigada (que, seamos sinceros, es la mayor parte del tiempo), cojo el bolígrafo, escribo el contenido de mi cerebro en la página, cierro el diario y me voy. La clave es que, en lugar de pensar en exceso, escribas en un estilo de «flujo de conciencia» en el que tu bolígrafo se mueva en un flujo continuo. El objetivo es acceder a la mente subconsciente para lograr avances y profundizar en nuestros patrones de pensamiento y comportamiento. Haz clic aquí para obtener mis 5 poderosos impulsos de diario de amor propio para la curación interior.
3. Recitar afirmaciones positivas
Una afirmación es una palabra o frase que cuando se repite una y otra vez, comienza a filtrarse en la mente subconsciente (que es lo que gobierna nuestros pensamientos y comportamientos). Puedes repetir mantras durante una meditación (piensa en el canto budista), decirlos en voz alta o recitarlos mientras te miras en el espejo. Louise Hay tiene brillantes ejemplos de afirmaciones en su página web. Algunos ejemplos de afirmaciones podrían ser
- Estoy completo.
- Estoy lleno.
- Soy perfectamente imperfecto.
- Merezco sentirme bien.
- O bien, ¡puedes inventar las tuyas propias!
4. Incorpora el amor propio a tus rituales diarios
Aunque estoy a favor de bailar desnudo bajo la luz de la luna, un ritual no tiene por qué ser nada del otro mundo. La idea de un ritual es aportar un nivel de importancia y significado a actividades que de otro modo serían rutinarias. Incluso tomar un baño de burbujas o hacer tu rutina nocturna de cuidado de la piel puede ser un ritual. La clave está en verter pensamientos y sentimientos de amor hacia ti mismo en esta práctica.
Por ejemplo, mientras te cuidas la piel por la noche, visualiza que envías rayos de amor y luz a la piel a través de las yemas de los dedos. O mientras te aplicas la loción corporal, date un masaje y un abrazo. De nuevo, estas cosas pueden parecer una tontería, pero ¿parecería tan tonto dar un abrazo a un amigo o a un ser querido para demostrarle tu amor y tu afecto? Por supuesto que no. Entonces, ¿por qué no mostrarte a ti mismo algo de amor y afecto de la misma manera?
5. Acepta las cosas que no puedes cambiar
Esto es, con mucho, lo más difícil para mí. El amor propio consiste en aceptar de todo corazón nuestro ser, con todo y lo feo que es. Por supuesto, todos deberíamos esforzarnos por ser mejores personas, pero es importante recordar que nadie es perfecto. Cuando cometas un error, no te castigues ni te obsesiones con él.
En lugar de eso, aprende de él y sigue adelante. En lugar de fijarte en tus estrías o en ese diente torcido, aprende a amarlos. De nuevo, sigo luchando con esto a diario, pero al incorporar esto a mi práctica diaria, no dejo que las cosas que no puedo cambiar me impidan abrazarme por completo.
Éstas son sólo algunas de las herramientas y trucos espirituales que utilizo para cultivar el amor propio. Y aún así, sigo luchando. Pero cuando me despierto sintiéndome mal, o como si no pudiera soportar enfrentarme a mi propio reflejo en el espejo, y mucho menos al mundo, voy directamente a mi caja de herramientas y empiezo a trabajar en la lista. ¿De qué manera practicas tú el amor propio? Me encantaría que me lo dijeras en los comentarios. Gracias por visitarnos.
Deja una respuesta